Hola chic@s!
Cómo están?
Este es mi primer post de Adictos a la escritura, y sé que aquí es un poco temprano, de hecho en una hora debo salir a clase, pero como sólo hay plazo de un día y allí son de España, decidí publicar esto temprano, por que depronto en la tarde no puedo.
Bueno, es mi primer proyecto y bueno, siempre me ha gustado escribir textos románticos, pero este mes decidí que haría algo un poco diferente. Espero les guste ;)
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Andy era un chico al que le encantaba hacer bromas, algunas más elaboradas que otras, pero todas terminaban en desastre…. Bueno, en desastre para la víctima.
Y era peor cuando alguno de sus amigos más cercanos creía en algún posible "Fin del mundo", como cuando lanzó el rumor de un virus se esparciría por el mundo y que acabaría con la raza humana. Le gastó una broma haciéndole creer que tenía el virus y que lo contagiaría. El pobre chico casi que no pudo soportar la broma.
Y el 21/12/12, para sorpresa de todos, fue la excepción. Él estaba muy tranquilo y aceptó con emoción y sin sospecha, un viaje de tres días que habían planeado para ir a una casa de campo de un familiar de uno de ellos.
Lo que Andy no sabía era que ese viaje tenía segundas intenciones, su grupo de amigos, cansados de sus bromas, se habían unido con el único propósito de gastarle una, tal vez así dejaría de hacerlas y dejaría a sus amigos en paz.
Todo fue muy normal durante el viaje, fue un recorrido de tres horas en autobús, en el que el grupo conformado por tres chicas y tres chicos se divirtió como nunca, cantaron en grupo, contaron historias graciosas y todos se esmeraron lo más que pudieron para que Andy no sospechara de su broma.
Pero allí ellos encontraron un problema, Andy era un experto en bromas, y bueno, no le tomó mucho tiempo para descubrir que algo tramaban. Así que estaría listo.
Cuando llegaron todo transcurrió muy normalmente: estuvieron en la piscina, pusieron música a todo volumen, bailaron como si no hubiera mañana, y se durmieron hasta ya muy entrada la madrugada
Andy ya podía imaginar lo que ellos iban a hacer, así que cuando despertaran todos, se llevarían una gran decepción, nadie podría sorprenderlo, nunca.
Cuando abrió los ojos se sorprendió al ver que habían tres chicos mirándolo, pero no eran personas normales, una no tenía un brazo y todos parecían tener la piel llena de cicatrices. Se alarmó un poco, pero recordó lo de la broma, así que sacó una pistola de agua que había guardado bajo su almohada, para quitar el maquillaje de zombies que tenían sus amigos.
Quedó en shock cuando disparó y el maquillaje no desaparecía, y a los chicos-zombies no parecía molestarles el agua.
—Ya es suficiente, chicos—dijo un poco nervioso cuando se le acabó el agua.
Luego notó algo, sólo habían ido tres chicos, incluyéndolo a él, ¿Cómo era posible que hubieran tres de ellos? No podían ser sus amigos.
Los zombies estaban en la parte contraria a la puerta, así que sin pensarlo dos veces corrió para salir, cerrando la puerta con tranca tras de sí. Trató de mantenerse tranquilo, ello debía tener una explicación, así que se puso en búsqueda de los chicos, llamó sus nombres, pero no hubo respuesta. Y cuando entró a la cocina se encontró con un olor espantoso, caminó hasta el lugar tras la mesa, para encontrarse con el cuerpo de una de las chicas en el suelo, estaba pálida y no parecía respirar.
Andy la sacudió para despertarla, le miró el pulso y no hubo respuesta, y en ese instante el pánico lo invadió. ¿Qué demonios estaba sucediendo? Cuando miró más allá, vio al resto de sus amigos en el mismo estado.
Más zombies aparecieron en la cocina, así que dejó a la chica en el suelo, y con lágrimas en los ojos, salió corriendo de la casa. Afuera la visión no era muy alentadora, los árboles estaban caídos y en llamas, esto no podía ser una broma.
Cuando volvió a ver a la casa vio que los zombies venían por él, iban más rápido de lo que supondría, y aunque empezó a correr, otro grupo de zombies vino por él, y en menos de un minuto, ya estaba rodeado y no había por donde escapar, se lo comerían y lo sabía. Así que se arrodilló en el suelo, cerró los ojos y esperó a que todo pasara, cuando sintió peso sobre él supo que era la hora.
Abrió los ojos de golpe, para encontrarse sano y salvo en su cama, sudaba como un cerdo y tenía lágrimas en los ojos, y cuando vio a su alrededor, allí estaban los zombies de nuevo, corrió gritando como una niña.
Se encontró de nuevo con una de sus amigas en el suelo de la cocina, empezó a desesperarse como un loco, ya no sabia que hacer; pero hubo un pequeño error, la chica del suelo comenzó a reírse.
Segundos después, sus amigos aparecieron riéndose mientras se quitaban las máscaras.
—¿Qué sucede?—preguntó Andy aún muy nervioso.
—¿Acaso no reconoces una broma cuando la vez? —dijo la chica del suelo que se levantó.
Todos esperaban que él se molestara, pero en cambio comenzó a llorar como un niño pequeño, uno de sus amigos fue a abrazarlo, y a duras penas sus amigos entendieron lo que Andy trataba de decirles, a pesar de que en verdad no había pasado nada y que el mundo no se había acabado, él había creído que sí y había tenido que ver que sus amigos habían muerto. Dos veces.
Tal vez sólo parezca una simple broma, pero para Andy fue mucho más que eso, nunca se había dado cuenta de lo mucho que sus amigos le eran importantes, y a su manera de verlo, las bromas eran algo que en el fondo lo demostraba. Claro que después de tremenda experiencia no volvería a hacerlo, ya no le producía el mismo placer que antes, y sus amigos podía ser muy macabros; siempre recordaría ese día como el fin del mundo, pero el mundo de sus bromas.
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Gracias por leer! ^^
Me encantaría leer sus comentarios!
